LA TEMPORADA DE ELPOZO MURCIA TURÍSTICA ANALIZADA DESDE LA GRADA. ¡¡ PASIÓN CON RIGOR !!

9.2.07

JORNADA 18 – Media docena al colista

Elpozo Murcia 6 - Cometal Celta de Vigo 0

Sería demasiado simple resumir el 6-0 de esta victoria considerándola un resultado previsible dada la diferencia clasificatoria entre ambos contendientes. Aplicar la lógica en el deporte y esperar a que ésta fermente por sí sola (que es casi tanto como confiar en la ley del mínimo esfuerzo) conlleva un riesgo innecesario que no puede permitirse un equipo campeón.

Por eso nos sentimos siempre tan orgullosos del comportamiento ejemplar de nuestro equipo: podremos tener mayor o menor acierto, estar lúcidos o con una empanada familiar, pero la actitud y la entrega forman parte irrenunciable del escudo y la filosofía de este equipo, desde el comienzo al final de los partidos, ¡y así nos va! –en el mejor y más merecido sentido de la expresión-.

Como es habitual, sobre todo en los partidos que jugamos en ese auténtico bastión que es el Palacio de los Deportes, desde el mismo pitido inicial intentamos imponer la ley del más fuerte, con una presión asfixiante. No se nos da bien especular; hay que mostrarse implacable e insistente en la búsqueda del marco contrario. Y en esto, juegue quien juegue de inicio, no hay diferencia alguna.

A la pertinaz baja de Wilde, que ha supuesto un evidente y contrastado bajón en la materialización de ocasiones, se sumaba, por sanción, la ausencia de Bácaro, el único pívot puro con el que contamos en nuestras filas. A pesar de no ser ese pívot que se estila, recibiendo en el centro del ataque e intentando hacer retroceder hacia atrás a la defensa contraria por evidentes razones de “peso” (Indiao, al más puro estilo Betao del Lobelle, ejerció ayer esas funciones en el equipo vigués), no contar con él obligó a Duda a improvisar nuevas estrategias, ingeniándoselas para marear la perdiz, imponer la mayor calidad técnica y evitar la contrapresión que, muy dignamente pero sin mayor acierto, intentó el Cometal Celta de Vigo a lo largo del encuentro.

Teniendo en cuenta la renta final y las debilidades defensivas del Celta en algunos momentos, si que podría considerarse ésta la victoria más holgada y aparentemente fácil de lo que llevamos de temporada. Precisamente la primera muestra de estas debilidades del colista la ofreció el cancerbero Arrivi (aunque luego compensaría deteniendo un par de lanzamientos sin barrera que podrían haber supuesto una sentencia anticipada del partido) ante un errado remate de Mauricio, que le pasó literalmente por debajo convirtiéndose en el 1-0. El 2-0 fue obra de Joel, ayer el estilete ofensivo del equipo con sus 3 goles, al superar con elegancia y suavidad al portero rival culminando una jugada de estrategia, y demostrando, de paso, que no sólo sabe castigar al balón con su potente derecha sino que también sabe aplicar remedios menos severos aunque igualmente efectivos. Sinceramente creo que está llamado a ser esta temporada una de las piedras angulares de la carrera de éxitos a la que estamos llamados.

Tras el descanso, al que podríamos haber llegado con mayor renta de no haber malogrado dos lanzamientos sin barrera a los que nos hicimos acreedores, la sentencia llegó en el minuto 28 con el tercer gol, obra de ese Cobeta trabajador y aplicado a la faena, culminando una excelente jugada combinativa. Además del gol, hubo premio acumulado, al mostrarle los árbitros la segunda tarjeta amarilla al céltico Chelito, lo que conllevó la consiguiente expulsión y dos minutos de superioridad.

No desaprovechamos la ocasión para poner más tierra de por medio y darle carpetazo, definitivamente, al encuentro. Joel marcó el cuarto, Mauricio el quinto, y nuevamente Joel, cerrando su sombrero de 3 picos, completó la media docena.

Excelente forma de festejar el reciente logro de la copa Ibérica, y casi más diría yo, la reciente decisión de la UEFA de conceder a Murcia la organización de la fase final de la UEFA Futsal Cup, la copa de Campeones de Futbol Sala para que nos entendamos. Será a finales del próximo mes de abril. Pero de aquí a entonces aún han de pasar muchas otras cosas, esperemos que todas buenas para nuestros intereses.

2.2.07

CAMPEONES DE LA COPA IBERICA (31-1-07)

Elpozo 2 - Sporting Lisboa 0

¡¡ YA SOMOS MÁS IBÉRICOS !!

Yo no sé por qué siniestro conjuro, el jamón, ese exquisito manjar extraído de los mismísimos andares de un animal tan poco poético como es el cerdo y con el que guarda nuestro género humano tantas similitudes genéticas -además de las propias de algunos impresentables comportamientos-, le gusta tanto a nuestros paladares, con independencia de la edad, la raza o la talla de los pantalones.

Y si además es ibérico, ya ni te cuento: se deshace cualquier boca y se babea sin ningún escrúpulo. Milagros de la bellota.

No se me ocurría una comparación mejor para explicar el sustancial empacho de gloria que nos hemos vuelto a dar a costa, esta vez, de la Copa Ibérica, ese nuevo galardón que, en lo sucesivo, lucirá en nuestra sala de trofeos junto al resto y al que podremos sacar brillo cuando rememoremos las gestas pasadas, presentes y las que están por llegar.

El encuentro de vuelta disputado anoche en el Palacio de los Deportes no es de esos partidos que serán recordados por lo espectaculares, lo emocionantes o la cantidad de goles que se marcaron (tan sólo fueron materializados dos), ni falta que hacía.

Las finales de las grandes competiciones no se ganan habitualmente luciendo el palmito y fabricando virguerías, sino sufriendo y bregando, desde los cimientos de la defensa. El derroche y la organización táctica desplegada por los pupilos de Duda rozaron la perfección. Solamente así se explica que todo un campeón de Portugal, país con honda tradición futbolsalera, apenas dispusiera de ocasiones de gol (Juanjo sólo tuvo que intervenir en un par de ocasiones, la última de ellas salvando un remate en el segundo palo con una estirada imposible).

Los goles del capi, Fran Serrejón, y de “Sandokán” Cobeta en el primer tiempo –buena muestra ambos del referido trabajo en equipo- fueron suficientes para doblegar al equipo luso, y de paso para torcer las esperanzas de la escasa media docena de integrantes de la “torcida” que habían comenzado tan animosos. De no haber sido por las 3 maderas de la portería defendida por Cristiano el resultado hubiera sido más abultado, reflejando con mayor justicia la notoria superioridad de Elpozo a lo largo de la primera parte.

En la segunda parte nos limitados a cantarle una nana al partido para dormirlo. Lo importante era la victoria. La búsqueda del lucimiento por el lucimiento hubiera conllevado abrir el partido y, una vez conseguida la llave del mismo, había que mantenerla a buen recaudo.

Dada la rapidez con que intentaron sorprendernos algunos jugadores rivales, como el escueto pero escurridizo número 10 (Déo), hay que reconocerle a Duda, nuevamente, su apuesta por la rotación y también por la cantera. Menos Vinicius (sancionado por la expulsión de la ida), jugaron todos los convocados: Raúl y Esquerdinha dispusieron de minutos importantes y cumplieron más que satisfactoriamente, Bácaro, como de costumbre, hizo un estupendo trabajo fajándose arriba, Kike -¿qué se puede decir de él que no se haya dicho ya?- con esa brújula incorporada que nunca pierde el norte, Álvaro desesperando al más pintado de los rivales con su inimitable cintura, Cobeta y sus vuelos acrobáticos más propios de la patrulla Águila, súper-Fran Serrejón corriendo por siete, y Joel y Mauricio sin desafinar. Hasta Wilde si hubiera salido habría corrido con las muletas como el que más. Al final, también Chico tuvo ocasión de saltar a la pista en sustitución de Juanjo, cuando el Sporting quemaba con el portero-jugador sus últimas naves en esta travesía Ibérica de la que ha vuelto a Lisboa un poco “codificado”, casi a juego con el característico rayado horizontal verdiblanco de su equipación.

Ya somos ibéricos. De bellota diría yo. La siguiente meta volante está en Lugo; será la Copa de España. Por lo pronto, el próximo sábado nos visita el Celta de Vigo. A seguir sumando en Liga.