COPA IBÉRICA - 1º partido LISBOA 10 enero 2007

Dentro de la vorágine de encuentros y competiciones en la que estamos inmersos esta temporada, casi sin haber digerido aún el roscón de Reyes, emprendimos nuestra primera aventura ibérica, con toda la ilusión en las tierras lusas (obsérvese la sutil figura literaria y el agudo juego de palabras con lo de ilusión en tierras lusas, ¡si es que cuando uno está inspirado!).

A la consabida y notoria baja de Wilde se sumaba la de Álvaro, ausencia también más importante, a pesar de lo que piensen sus detractores (que los hay, porque hay gente que sólo aprecia y estima a quien marca los goles y se olvida del que los fabrica). A favor contábamos con el debut en competición oficial del jóven talento del equipo filial y máximo realizador de la División de Plata, Esquerdinha, aunque por tener nacionalidad brasileña no pueda actuar en el resto de competiciones al tener cubierto Elpozo el cupo de extranjeros.

Del partido, según cuentas las crónicas, no puede decirse que fuera bueno. Tal vez lo mejor el resultado, un empate a uno que, con la imprescindible cautela y el máximo respeto a todo rival puede hacernos soñar desde ya con conseguir el segundo título de esta temporada en la vuelta a disputar en Murcia el próximo 31 de enero. Un empate forjado, sobre todo, en un gran trabajo defensivo del equipo, y en el gran sacrificio y esfuerzo al que nos estamos acostumbrando para sobreponernos a la cantidad de obstáculos (entre ellos los arbitrales) con lo que nos está tocando enfrentarnos esta temporada. Entre ellos, reconozcámoslo, sigue figurando la rémora de esos momentos de baja concentración que suelen convertirse en goles encajados.

Por suerte, en el Pabellón de la Paz y la Amistad, no fue el caso, ya que el único gol portugués se produjo en lanzamiento de 10 metros con tan sólo 13 miutos disputados, lo que nos da una idea del riguroso hacer de la pareja arbitral, dos colegiados locales... ¿alguien me puede explicar cómo pretende la UEFA, la FIFA o el órgano competente al caso, elevar el futbol sala a los altares del deporte con estas actitudes?

El gol del local Adolfo fue el único de los lisboetas, a pesar de que, ya entrada la segunda mitad, el Sporting contó con una superioridad numérica durante dos minutos, como consecuencia de la expulsión de Vinicius. Según las cualidades comentadas con anterioridad (lucha denodada, entrega y sacrificio colectivos) es ante estos contratiempos donde se demuestra esa raza especial de campeones que ha ido moldeando Duda con su saber hacer, su honestidad y su sabiduría, ya que conseguimos mantener nuestro marco a cero. Y de ahí al final, la incansable búsqueda de la merecida recompensa del glorioso empate; glorioso porque sabe a gloria, glorioso porque hubiera sido histórico que nuestro casillero particular se hubiera quedado a cero y glorioso porque nos puede conducir a la consecución de otro nuevo trofeo internacional.

Contaba Gregorio León en su retransmisión que Joel había sido el mejor por nuestra parte (¡lástima no haber estado in situ para haberlo comprobado personalmente!). Algo está cambiando, qué duda cabe. ¿Será este el año de nuestra particular perla lusa? A mi siempre me ha caído bien este zagal, y me da muy buenas vibraciones.

Señoras y señores, que el ritmo no pare.